OAZ Coaching para el cambio | Liderazgo y equipos

Ayudo a personas y equipos a parar, reflexionar y tomar decisiones en entornos complejos para avanzar hacia el futuro deseado | Liderazgo, equipos y transformación cultural de pymes | Donostia, Gipuzkoa, País Vasco y Navarra

menu

  • HOME
  • SERVICIOS
    • SOLUCIONES
      • DESARROLLO LIDERAZGO Y EQUIPOS
      • ESPACIOS DE CONFIANZA, PARTICIPACIÓN Y CORRESPONSABILIDAD
      • ALCANZAR OBJETIVOS ESTRATÉGICOS
    • PROCESOS
      • Personas que crecen: Coaching ejecutivo y profesional
      • Equipos que suman: Coaching de equipos
      • Consultoría y coaching empresarial
      • Formación para profesionales
    • CLIENTES
  • OAZ
    • OAZ: Olaia Agirre Zabaleku
    • LIBROS
    • ENTREVISTAS
  • BLOG OAZ
  • HABLAMOS?

Inteligencia ¿emocional?

17 abril, 2015 by Olaia Agirre Leave a Comment

Post publicado originalmente en el Blog de EITB de Inteligencia Emocional

Hay situaciones que nos superan, que nos tocan tan de cerca que perdemos la perspectiva…¿Cómo diferenciar «la realidad», lo que está pasando de manera más objetiva, y el estallido de emociones que tiñe esa realidad? Tanto en momentos «calentón», donde el enfado o la ira nos invaden, como en momentos de «subidón» o de euforia hace que veamos una realidad, la nuestra, que pasado un tiempo y rebajada la intensidad emocional, nosotros mismos nos extrañamos de nuestra propia actuación… Pero, ¡si no era para tanto!. ¿Os suena?

[Read more…]

Filed Under: Coaching ejecutivo y de equipos, Desarrollo de personas y equipos Tagged With: autoconocimiento, blog eitb inteligencia emocional, CIE, consorcio inteligencia emocional, daniel goleman, emociones, empatia, inteligencia emocional, motivación, relaciones interpersonales

Aprendiendo a lograr un sano reconocimiento

27 marzo, 2015 by Olaia Agirre 1 Comment

respeto
Post originalmente publicado en el Blog de Inteligencia Emocional de EITB
¡Basta ya!
¡Hasta aquí hemos llegado! 
¿Has sentido alguna vez la impotencia, la rabia y esa sensación de que no te queda ni una gota de sangre ni paciencia en alguna situación?
¿Y qué más?

 

Me encuentro con muchas personas que se han visto enredados en situaciones en los que se les pedía más y más, en los que se crean una serie de obligaciones y servidumbres que les llevan a sentirse agotados emocionalmente (y físicamente), con resentimiento, sintiendo ¿y qué más?, pero al mismo tiempo sintiéndose que «no son suficientes» porque a pesar de dar y dar, parece que no es suficiente.

Son relaciones tóxicas en las que se ha perdido la paridad, el equilibrio en la relación. No hablo de situaciones extremas (con patologías de por medio), sino de relaciones en los que la cosa ha ido derivando a «te doy la mano y me coges el brazo».

Desde fuera podríamos ver la situación como víctima y «aprovechón», pero tampoco creo que hay buenos y malos en estas historias, sino más bien me encuentro con problemas a la hora de fijar de una manera sana los límites personales, y ciertos grados de inconsciencia, y comodidad, y por qué no, egoismo, por parte de la otra persona. ¿A quién le amarga un dulce?

En este tipo de situaciones, normalmente una de las partes tiene una creencia inconsciente de que «siendo un niño bueno» , es decir, haciendo cosas por los demás, estando disponible para ellos, haciendo favores, diciendo más si que no,… le van a aceptar mejor. Va a ser merecedor de su cariño, de aceptación. Se siente valorado y reconocido por esa predisposición que tiene.

Pero es un juego que tiene un alto precio para la persona...

Porque al principio lo consigue, y le ven con muy buenos ojos, e incluso se lo reconocen. Pero a lo bueno todos nos acostumbramos, y resulta que lo empezamos a ver como algo normal y dejamos de reconocer el esfuerzo. 

Pero la otra persona sigue estando necesitada de aceptación y reconocimiento, y cuando le piden algo más, no quiere decir que no, aunque es lo que en realidad querría decir, y accede. Y poco a poco, se encuentra con que su entorno espera de él una serie de comportamientos, se sienten con derecho a pedirlos, porque la experiencia les dice que «esa relación funciona así», y además, está muy cómodo en esa posición. Pero ese y más y más, que es un juego en el que esa persona también participa (no hay buenos y malos), le empieza a generar resentimiento a causa de todos los no-es no dichos, de todo ese esfuerzo no reconocido,… y hace que cada vez se sienta más pequeño, más «no soy suficiente».

Y un día, como consecuencia de ese resentimiento acumulado, esa persona explota. Se decide a decir NO, a pedir su espacio, a cambiar los límites que le habían arrinconado,… y crea un terromoto a su alrededor. ¿Pero qué le ha pasado a éste? ¿Qué mosca le ha picado?

Hay que entender que en esa situación que se ha creado, el entorno estaba muy cómodo, y la verdad, no se habían parado a pensar que esa relación no funcionara bien. ¡Pero si nos llevábamos muy bien!!!

Y hablan, y se entienden (aunque sea un poco), y deciden cambiar algunos comportamientos, algunas reglas de juego,… pero como todo cambio, genera incomodidad, y los hábitos adquiridos (y los beneficios que ello suponía para una de las partes) tienden a querer restablecer la situación como estaba. Consciente o inconscientemente… los hábitos son difíciles de cambiar. 

Una reafirmación de una sana autoestima, sabiendo lo que estamos dispuestos a admitir y qué no, de comunicarlo de manera positiva, y sobre todo, actuando de manera coherente, sin bajar la guardia, es la única salida a esa situación.

Si quieres ser respetado por los demás, lo mejor es respetarte a ti mismo.Sólo por eso, sólo por el propio respeto que te tengas, inspirarás a los otros a respetarte.

Fiodor Dostoyevski

Porque si lo consigue, al final, se da cuenta que cuando consigue ponerse en su sitio, empieza a recibir la aceptación y el reconocimiento que estaba buscando, pero no ya ahora por ser «el niño bueno que me hacía favores», sino porque es una persona que muestra fortaleza de carácter (que no agresividad), y sabe defender sus intereses, a la par que respetar la de los demás.

¿Te has encontrado con este tipo de situaciones?

 ¿Cómo los has superado?

 

CONTACTAR OAZ COACHING PARA EL CAMBIO
AHORA,  ¡DEPENDE DE TI!!

desarrollo organizativo y de personas

Filed Under: Coaching ejecutivo y de equipos, Desarrollo de personas y equipos Tagged With: aprovecharse, asertividad, asociacion consorcio inteligencia emocional, CIE, cuando me ame de verdad charles chaplin, decir no, poner limites, reconocimiento, resentimiento

Respuestas correctas ¿a preguntas erróneas?

7 noviembre, 2014 by Olaia Agirre Leave a Comment

Hemos hablado ya en este foro en contadas ocasiones sobre el concepto subjetivo que tenemos de la realidad. Esta semana, a raíz de algunas conversaciones que me han llevado a cuestionar (y a cuestionarme) esa idea de realidad que cada uno tenemos,  y en base al cual nos comportamos, y de un vídeo que adjunto al término de este post, que encarecidamente te animo a que lo veas, me apetece volver a bucear en esta idea.

 ¿Me acompañas?

Te anticipo la conclusión en estado beta (es decir, en construcción, abierto a aportaciones, y por tanto a cualquier tipo de cambio constructivo):

Si las preguntas determinan el marco de atención y definición de nuestra realidad, y teniendo en cuenta que las respuestas son importantes… Tener respuestas correctas a preguntas o marcos de realidad erróneos difícilmente mejorará nuestra realidad

[Read more…]

Filed Under: Coaching ejecutivo y de equipos, Desarrollo organizativo: estrategia y su implementación, Gestión del cambio Tagged With: accion reaccion, CIE, enfoques, inteligencia emocional, interpretaciones, realidad

Tener suerte o crear suerte, he ahí la cuestión… (Mi post en blog EITB Inteligencia Emocional)

10 octubre, 2014 by Olaia Agirre Leave a Comment

¿Te suena este tipo de escena? Personas que su conversación son un relato de quejas e infortunios, que parece que “les ha mirado un tuerto”, porque parece que nada les sale mal…

Construir tu suerte - actitud
Image courtesy of Gualberto107 at FreeDigitalPhotos.net

Pues hace un par de días, fui testigo de uno de ellos, un cuarto de hora durante las cuales las incesantes “quejas” se sucedían una detrás de otra, con comentarios de “… y no me quejo, ¿eh?”… Sus palabras denotaban rabia y  enfado con la vida, porque parecía que “la diosa fortuna no le había agraciado con su presencia”.  [Read more…]

Filed Under: Coaching ejecutivo y de equipos, Desarrollo de personas y equipos, Desarrollo organizativo: estrategia y su implementación, Liderazgo Tagged With: actitud, actitud positiva, blog eitb inteligencia emocional, CIE, inteligencia emocional, proactividad, suerte

Si pudieramos ver a través de los ojos del otro…

12 septiembre, 2014 by Olaia Agirre Leave a Comment

Solemos tener la falsa ilusión de que la realidad es tal y como la concebimos cada uno de nosotros. Pensamos que las situaciones son como las vemos, pensamos y sentimos en un momento dado. Sin tener en cuenta que incluso nosotros mismos, reaccionamos de diferente manera ante una misma situación en función del momento personal en el que nos encontremos.

No nos afecta lo mismo un comentario de un compañero si ese día has conseguido cerrar el acuerdo que tanto tiempo llevabas persiguiendo, que si te encontrabas de bajón por algún problema familiar o laboral. El comentario, la intencionalidad, la persona es la misma… pero nosotros no somos los mismos.

Por tanto, ¿cuál es la realidad? ¿Es una realidad única y objetiva, o hay “tantas realidades como personas y momentos”? Hay contextos en los que esa realidad es objetiva: mi teléfono funciona o no funciona,  cuando ponemos una proporción de 250 gramos de harina por cada litro de leche en la receta de la amona aquello sale riquísimo, estoy o no estoy embarazada…  Pero normalmente las objetividades se dan en
terrenos más técnicos. Cuando incluimos a las personas en la ecuación…. ¡ay, no existen las ciencias exactas!

Lo que a una persona le gusta a otra no, lo que a uno le motiva al otro para nada, lo que funciona para conseguir compromiso por parte de un grupo de personas con otro se queda
corto,…¡Pero precisamente en esa subjetividad diferencial es donde radica la magia y la grandeza de las personas! Pues siendo todas diferentes, son todas valiosas y aportan su toque de color a la paleta de colores que es la vida.

Pero se nos suele olvidar… y cuando en el día a día vamos a la carrera, ocupados en las miles de cosas que llevamos en la cabeza (la lista de temas pendientes, la reunión que no llego, el informe que todavía no he preparado, la llamada a Jesús que no se me olvide,  que se me hace tarde y todavía no he preparado la oferta para mañana,… ¡ah! y que cuando salga de trabajar tengo que pasar por la farmacia…), y nos vamos “cruzando” con las personas de manera “cuasi-atropellada”, sin tomarnos el mínimo tiempo necesario para elaborar la forma (ni a veces el contenido) ni  el momento en la que nos comunicamos con ellos, y con nuestras orejeras puestas e inmersos en nuestra realidad,  les soltamos aquello que para nosotros es claro… clarísimo… ¡cristalino!… ¿cómo es que no nos han entendido?

O cuando alguien nos comunica algo que para esa persona es importante, y nos atrevemos a aportar nuestra visión del tema, y con nuestra vara de medir soltamos a bocajarro nuestros juicios de valor, lo que está bien y no, lo que es posible o no… ¡para nosotros!!!

Pequeños roces, más o menos importantes, que generan más o menos dolor y malestar… que se podrían evitar fácilmente si entrenáramos nuestros niveles de empatía.  La empatía, que como la define Brené Brown (Doctora en Psicología e investigadora en la Universidad de Houston) es la habilidad que alimenta la conexión entre las personas.

conexion, empatiaPorque empatizar, en muchos momentos significa escuchar, simplemente escuchar, sin necesidad de “arreglar”  nada, decir simplemente “Te entiendo, aunque no sé qué decir”.  Significa conectar con la realidad que esa persona está viviendo, reconocer su vulnerabilidad (lo que está viviendo, sus emociones,…) porque reconozco y entiendo esa vulnerabilidad en mí mismo.

Para que esa conexión sea real y permita crear un puente real hacia la otra persona, requiere:

 

  • Mantener  perspectiva para reconocer esa verdad como la verdad de esa persona: no necesariamente tenemos que estar de acuerdo,  ni compartirlo, pero la reconozco y entiendo.
  • No emitir juicio: respetar su verdad, sin opinar ni pasarlo por el tamiz  de mi sistema de valores y creencias.
  • Reconocer las emociones en la otra persona: ¿cómo está viviendo esa situación? ¿qué emociones subyacen?
  • Comunicárselo:  te entiendo… y estoy aquí…

 

Porque cuando realmente se consigue construir ese puente que permite conectar a dos personas, se producen esos momentos ¿mágicos? en los que realmente somos dos personas que compartimos y mostramos al otro un pedacito de nosotros mismos y de nuestra realidad.

¿Puede ocurrir un milagro mayor
que ver a través de los ojos del otro por un instante?
(Henry David Thoreau)

[Read more…]

Filed Under: Coaching ejecutivo y de equipos, Desarrollo de habilidades, Liderazgo Tagged With: Brené Brown, CIE, comunicacion, conexión, conflictos, emociones, empatia, inteligencia emocional, personas, puentes

  • 1
  • 2
  • Next Page »
  • Correo electrónico
  • Facebook
  • Instagram
  • LinkedIn
  • RSS
  • Twitter

    Nombre (requerido)

    Correo electrónico (requerido)

    Asunto

    Mensaje

    captcha

    Recabamos tu nombre y email con el fin de poder contactar contigo para responder a tu consulta.
    Comprueba nuestra política de privacidad para obtener más información.

    • CONTACTO
    • AVISO LEGAL – POLITICA PRIVACIDAD- LEY COOKIES

    Copyright OAZ Coaching para el cambio © 2022