Hablamos de asumir el control de mi propia vida, asumiendo la responsabilidad de mis actos (y sus consecuencias) y del logro de mis metas, asumiendo la capacidad de elección que tengo en todo momento.
¿Qué estoy haciendo o no haciendo?
– Yo soy responsable de la consecución de mis deseos
– Yo soy responsable de mis elecciones y acciones
– Yo soy responsable del nivel de consciencia que dedico a mi trabajo
– Yo soy responsable de mi conducta con otras personas
– Yo soy responsable de la manera de jerarquizar mi tiempo
– Yo soy responsable de la calidad de mis comunicaciones
– Yo soy responsable de mi felicidad personal
– Yo soy responsable de aceptar o elegir los valores según cuales vivo
– Yo soy responsable de elevar mi autoestima
¿Me pregunto a mi mismo qué estoy haciendo y actúo en consecuencia o miro alrededor qué hacen los demás? La ley de causa y efecto existe, todo lo que hago tiene una consecuencias, y yo desde mi capacidad de elección, decido hacer o no hacer algo que tiene un efecto.
No puedo excusarme en mi inconsciencia. Hacer y no hacer tiene sus consecuencias, ¿y quién elige el hacer o el no hacer?
Deja una respuesta