Es obvio que vivimos una situación de cambio e inestabilidad. Lo que hasta ayer servía, parece que hoy, ante un entorno cambiante, ya no sirve y urge reinventarse y desarrollar, más bien despertar, nuevas capacidades y habilidades de liderazgo internos.
La actual situación económica y la competencia, exige a las empresas y a los profesionales un desempeño superior a la media para poder sobrevivir en unos mercados inestables, fragmentados y disputados. Un desempeño, que requiere cambios fundamentales en la actitud, en la conducta gerencial y en las estructuras profesionales.
En realidad, lo que nos demandan es que pongamos en valor nuestras fortalezas y habilidades, y demos un paso adelante, actuando desde la responsabilidad. Tomando decisiones, apoyando, colaborando, dejando hacer, creando equipo… para complacer ya no al jefe, sino al cliente, que es el que en última instancia nos da el aprobado o no.
La buena noticia, que todos tenemos esa habilidad, no es privilegio de unos pocos, y de aflorarla, la amenaza que supone este entorno que a primera vista parece hostil, puede convertirse para nosotros en oportunidad.
Las competencias más demandadas
Esta necesidad latente queda reflejada en diversos estudios, y prueba de ello este texto que extraigo del
I Informe Adecco Professional «Los Directivos + Buscados» .
«El directivo español ideal es aquel que motive y sepa gestionar a los trabajadores desde el interior y sea capaz de repartir responsabilidades. Debe valorar a cada individuo como personas, no como individuos, y hacerles sentir parte de la empresa. Dejar espacio para trabajar es esencial y debe dar también un margen de error para fomentar el aprendizaje.
El directivo ideal debe confiar en su equipo y tener la capacidad de liderazgo suficiente como para delegar en cada uno de sus miembros funciones dependiendo del cargo que ocupen. Debe ser un aliado, no un enemigo.
Además, el directivo que en la actualidad demandan las empresas debe ser capaz de liderar procesos de internacionalización, o fomentar la innovación en un momento en el que la oportunidad de crecimiento de muchas compañías pasa por la apertura a otros mercados o por crear nuevos productos y servicios para llegar a un mayor número de potenciales clientes».
¿Pero en qué se traduce ese desarrollo y expresión del liderazgo?
A mi entender, la expresión del liderazgo debe ser una combinación de ser y hacer que entre otros factores, y sin ánimo de ser exhaustiva, se traduce en:
- Definir y comunicar un objetivo claro, un motivo que guíe cual faro a la persona y al equipo. Una luz que nos recuerde el rumbo cuando la vorágine del día nos absorba y nos permita tener criterios a la hora de valorar la importancia y la conveniencia o no de actuar de determinada manera.
«Las personas con éxito no son las más inteligentes,
son las que definen objetivos«
Lewis Terman Universidad Stanford (1921)
- Crear espacios donde se valoren y respeten a las personas y se posibilite que salgan a la luz las habilidades y fortalezas de nuestra gente ( ver post anterior )
«El rendimiento medio de los empleados es inferior al 40% de su potencial.
No se trata de dejadez o mala intención, sino más bien de que nadie
se ha preocupado de aprovechar el 60% restante»
Extraído del libro Marca Personal – Andrés Pérez Ortega
- Crear espacios de confianza (ver post anterior) donde poder permitir contribuir a las personas, desde la experimentación y el aprendizaje desde la responsabilidad. Para que este aprendizaje se haga desde la responsabilidad, y se traduzca en la toma de decisiones oportunas, sería recomendable consensuar:
- Los resultados deseados: coherente con la misión/estrategia/metas de la empresa y los valores/metas/necesidades personales
- Las guías: principios básicos que se desea que se sigan, procedimientos fallidos en el pasado,…
- Las personas, los recursos presupuestarios, estructurales y sistémicos con los que se cuenta para alcanzar el objetivo
- Presentación de cuentas; cómo se va a medir la evolución y el logro de los objetivos
- Consecuencias de alcanzar o no alcanzar los resultados.
Stephen Covey – El liderazgo centrado en principios
Dotar de capacidad y criterios de elección ante las cada vez mayor número de elecciones encontramos a nuestro alcance: unos objetivos bien definidos y un área de actuación y responsabilidad bien definidos nos otorgan criterios de decisión necesarios valorando a su vez en su justa medida el coste de error de las mismas.
- Crear un espacio de desarrollo donde se creen espacios donde compartir y recibir un feedback constructivo y enriquecedor sobre los diferentes comportamientos. Este feedback debe ser sincero, desde el deseo real de ayudar en el desarrollo, poniendo luz sobre las áreas de mejora y desarrollo, y retando a las personas y a los equipos a mejorar en clave de oportunidad.
- En definitiva, se trata de ser, comunicar y comportarse como deseas que sea, se comunique y comporte tu equipo y tu entorno, es decir, siendo un ejemplo de lo que deseas observar en el entorno, porque en definitiva, la capacidad de liderazgo empieza por liderarse y desarrollarse uno mismo.
Dos ideas para finalizar….
- «Se tú el cambio que quieres ver en el mundo» Mahatma Gandhi.
- La actitud es un reflejo del liderazgo: vídeo extraído de la película «Titanes»

espectacular tu pagina, gracias por el aporte, esa área de actuación y responsabilidad bien definidas son determinantes para lograr cualquier objetivo.
Gracias Omar, me alegro de que te ayude. Efectivamente, para lograr alcanzar objetivos, hay que crear el contexto adecuado que lo posibilite. Un saludo!
Muchas gracias Loreyn por el entusiasmo mostrado. Me alegro de que te guste y te aporte!!!
Esta muy padre esta pagina es lo que necesitamos como mexicanos muy muy bien:-)
Gracias Nuria por tus palabras, para mi tienen un gran valor porque se que vienen desde dentro, desde el ser y el sentir. Y efectivamente, es desde el reconocer el liderazgo en uno mismo, desde dar confianza, aceptar, ofrecer un feedback sincero que permita mejorar,… desde esas habilidades que a veces están latentes o dormidas, desde donde puedes mostrar y permitir a los demás actuar desde su potencialidad, y que esta se desarrolle y se convierta en una realidad.
Tus reflexiones se sienten profundas, el centro es la persona, reconociendola siempre. Me resuenan dos palabras despertar, mas alla de desarrollar a un lider en funcion de una empresa o un objetivo o tarea concreta. Despertar al lider de cada uno. Y me resuena la palabra error, diria algo mas …fomentar el error es fundamental, probar, probarse, y como bien apuntas sabiendo los limites y las consecuencias. En estos tiempos donde cada decision parece tragica el objetivo del lider es la mejora de su serenidad.
Olaia lanzate hacia tu propia fuerza, tus visiones no necesitan de la fuerza de los maestros en palabras ni de sus estudios. Tienes la sabiduria de ser, de experiencias profundas.. Te admiro y quiero mucho.. sin referencias